Como valores ampliamente aceptados han pasado a formar parte de nuestro acervo cultural y de ese ente abstracto que Jung denomino inconsciente colectivo. Como muy bien señala Stanislav Grof en las conclusiones de su excelente obra, "Psicología Transpersonal", estos principios nos siguen influyendo en nuestra busqueda del bienestar. Así nos encontramos en una búsqueda incesante de una mayor bienestar y de un cada vez más alto nivel de conciencia o desarrollo espiritual.
Perseguimos una quimera, influenciados por nuestra cultura, siempre intentando ir un poco más allá, sin dejar que nuestro ser asimile los logros obtenidos. Incluso el lenguaje me traiciona al intentar transmitir esta tesis, usando un término productivista como logros.
Siempre buscando encontrarnos mejor, ampliar nuestra conciencia, nos olvidamos de lo esencial, conectar con nuestro interior, permitirnos ser humanos, y por tanto falibles y dejar de buscar, porque mientras más perseguimos algo, más se nos escapa.
Eso no quita que no tengamos que superar o aprender para dejar de estar ancladas en nuestros traumas del pasado, pero aunque no nos encontremos del todo bien, debemos dejar actuar a nuestra sabiduría interior con su potencial de autocuración y dejar que se vayan produciendo los efectos de nuestros aprendizajes y maduren en nosotros, saliendo de esa espiral de búsqueda de la mejor terapia o la mejor práctica espiritual.
Paciencia y aceptación.
1 comentario:
Quiero manifestar mi consenso ante tus afirmaciones que me resultan sabías hasta en su modo de exposición, habiendo apuntado en pequeños destellos, sin abarcar toda la sabiduria por alcanzar, y sin entretener al viajero entre todas las puertas de entrada.señalando la falacia de la búsqueda, y haciendo responsable al que venía antes de nosotros por empujarnos al saco de la cultura.Gracias Curro por estos destellos de comprensión.
te regalo un link por si todavía estás vivo y quieres saber si hay otras vidas, en otras planetas.
http://vimeo.com/11741000
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