"... si existe algún don en mi, no me pertenece, sino que me atraviesa.
No podría reivindicarlo como mío, no pertenecen al curandero sus
aptitudes para sanar: éste es, más bien, un vehiculo humilde para la
sanación. La naturaleza del poder del chamán es la de situarse a
disposición del prójimo y poder ayudarlo a liberarse del sufrimiento,
entregarle claves para su expansión."
Luz en vuestras vidas.
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