En relación al poema de Noviembre el maestro Sozan dice:
“El mucho hablar y el mucho pensar te incapacitan;
deja de pensar y deja de hablar,
así no habrá ningún lugar fuera de tu alcance.”
Normalmente cuando sufrimos de una gran excitación o dispersión mental, solemos tomar dos actitudes, o hablar por los codos, verbalizando nuestro incesante chorreo de pensamientos, o no hablar nada, ensimismados en nuestra agitación mental. En ambos casos nuestro contacto con la realidad es escaso.
Cuando comenzamos a calmar nuestra mente y a experimentar y sentir la inmensidad que albergamos en nuestro interior, somos presa de una errónea y perentoria necesidad de comunicar al mundo nuestro “descubrimiento”. En esta situación me encuentro ahora mismo.
Pero como se dice en el zen cuando no tengas nada que decir, entonces puedes hablar.
Cuando me calle, entonces podre enseñar algo. Mientras tanto balbuceos sin sentido.
3 comentarios:
Muy bueno. Me ha gustado mucho. Besitos.
Últimamente cuando has subido algún comentario al blog, no he hecho ningún comentario, y he de reconocer que me hubiera gustado escribir algo, sobre todo que tus comentarios eran mejores y más acertados que los mios, que denotaban mayor sabiduría.
Llevo unos meses regular y no estoy muy fino. Estoy inmerso en una lucha conmigo mismo y no se muy bien como voy a salir de este.
Un abrazo
Esto no es una competición, es la vida. Cada uno camina a su ritmo, su propio camino. La meta es la misma para todos.
Estoy aquí, contigo, no estás sólo; y no sólo yo, somos muchos los que te apreciamos y te queremos. Las luchas sólo traen pérdidas. No luches, con amor vencerás. Ámate a ti mismo y ama a tu prójimo, igualmente. Cuando el corazón se abre plenamente, ves que hay sitio para todos, y tú también estás dentro.
Si he comentado casi todas tus entradas ha sido porque pedías que lo hiciéramos, para servirte de espejo. Eso es lo que he hecho. Tú eres mi espejo, yo soy tu espejo. No hace falta que contestes a nada. Escribo con mi mejor intención, desde el corazón.
Te quiero mucho. Ánimo, vas a salir de este y de todos los que vengan. Ánimo. Un fuerte abrazo.
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